En Imagen: Carolina Vélez, fundadora de Oropéndola

La diseñadora de moda Carolina Vélez estudió Diseño de Moda en Medellín, Colombia. Su pasión reside en sus raíces: el arte y las artesanías tradicionales colombianas. En una época en la que los diseñadores se ven obligados a producir a gran velocidad y con la máxima eficacia, sus diseños combinan la artesanía ancestral con un estilo contemporáneo y elegante. Su marca, Oropendola.CO, se centra en la artesanía local para crear arte para vestir.

"Mi misión es realzar la artesanía colombiana. Quiero resaltar el trabajo de los artesanos y mostrar sus habilidades al mundo. Quiero que sean capaces de crear lo que quieran; piezas que ni siquiera han imaginado que podrían crear".  Resumiendo sus motivaciones, Carolina dice: "Nuestra gente, nuestros artesanos, sus historias son lo que nos inspira".  Las piezas que crea Oropéndola tienen un valor incalculable, no en términos monetarios, sino por todas las historias que pertenecen a cada persona implicada en el proceso de su elaboración.

Carolina es una diseñadora con una misión, y uno se pregunta cómo consigue sus objetivos. "Uno de los mayores retos de trabajar con artesanos es que son artistas, no conocen el concepto de tiempo. No gestionan los plazos, no piensan en los precios, las personas implicadas, los procesos, el inventario. Es difícil gestionar su tiempo, con nuestro tiempo y el de la gente".

Como empresaria ha aprendido que es crucial entender y aceptar que uno no va a saberlo todo. "No tienes habilidades en todas las facetas del negocio. Necesitas creer en los demás y en su experiencia para construir una marca sólida, o una empresa". Su consejo a otras personas que estén pensando en crear una empresa es que "construyan su negocio sobre su pasión, porque eso es lo que les va a motivar para superar cualquier obstáculo".

Cree que las cualidades para alguien que está empezando un negocio son la pasión, la persistencia, la humildad y el sentido de comunidad, Carolina dice que "un negocio sostenible consiste en pensar en las necesidades de los demás".

Carolina es una firme defensora de su personal femenino y ofrece este consejo: "Un factor que ha contribuido al crecimiento de nuestra marca es que se centra en las mujeres.  Las mujeres se apoyan entre sí, se comunican, se conectan y ayudan a correr la voz". Su visión es empoderar a las mujeres creando artículos de moda que las hagan sentirse importantes, poderosas y únicas.

Para los que no lo saben, el nombre Oropéndola hace referencia a un ave autóctona de América Central y del Sur. A la hora de bautizar su negocio, Carolina se inspiró no sólo en la belleza del ave, sino en sus patrones migratorios: "En Oropéndola hablamos de migrar a diferentes saberes artesanales, como metáfora de nuestro deseo de mantenernos actualizados y fortalecer ese conocimiento".

La página web de Oropéndola, busca llevar la moda artesanal local colombiana a un público global. Carolina, eligió un dominio .CO porque representa a Colombia y sitúa a los artesanos locales en un escenario global. Quiere que su marca dé a conocer la riqueza cultural única, la artesanía del comercio local y el verdadero valor que hay detrás de sus productos colombianos: las historias de los artesanos locales que los fabrican. En Oropéndola, el diseño de lujo se une a las técnicas artesanales locales, en un centro neurálgico de la moda artesanal en constante evolución.

Carolina, está trabajando en futuras oportunidades para ella y la marca Oropéndola y hay muchos más obstáculos que está decidida a superar. Quiere expandirse a nuevas comunidades, implicar a nuevos grupos de artesanos y explorar nuevas técnicas y materiales en sus diseños. Una cosa que sabemos con certeza es que la moda y las historias que hay detrás de cada una de las piezas de Oropéndola nos hacen volver por más.

Como dice Carolina, el éxito trasciende las oportunidades económicas y consiste en generar relaciones humanas y mejoras en la calidad de vida de las personas implicadas en cada proyecto. "Se trata de creer en los demás".